Alguna vez te has preguntado ¿qué tiene el café cubano que lo diferencia al del resto del mundo y que no podemos dejar de disfrutarlo así vivamos fuera de Cuba?
No es que sea un misterio ni mucho menos, para nosotros los cubanos la respuesta es muy simple, lo tiene todo, sabor, aroma y dosis exacta.
Hoy en día es más fácil disfrutar del expreso cubano en cualquier parte del mundo porque nuestra presencia en cada rincón del planeta es cada vez más extensa.
¿Qué Características tiene del Café Cubano?
El café cubano es muy particular, su tueste debe ser oscuro para afianzar el dulzor del mismo, se prepara bastante dulce y además es muy concentrado.
En Cuba, el café intenso que se prepara en los hogares no suele ser tan espumoso como el expreso, pero si es de sabor más fuerte que el café americano y no lleva leche, tampoco hay necesidad de añadirle azúcar porque el buen cubano ya le agrega desde el preciso momento en que se comienza a preparar.
En resumidas cuentas, podemos simplificar todo esto a tan solo 3 características: Nuestro café cubano es fuerte, breve y dulce.
Dentro del país, existen lugres específicos donde se cultiva, según las características del suelo son los sitos idóneos para encontrar el mejor grano de café cubano como en la Sierra Maestra y el Macizo montañoso de Sagua-Baracoa, las zonas del Escambray y Sierra del Rosario.
La principal variedad cultivada en el país es la Coffea arábica y las siguientes son la Typica, Bourbon, Catuai amarillo y rojo, San Ramón, Villalobos y Caturra amarillo y rojo. Otras marcas son: Pilón, La Llave, Bustelo, Serrano y Turquino.
¿Cómo se prepara el Café Cubano?
Lo cubanos tenemos tres formas principales de preparar el café: en colador, en cafetera y por último con espuma.
Cuando se prepara en colador, primero se hierve la cantidad de agua que se va a utilizar, luego se le añade el punto de azúcar que se desea para posteriormente verter esta mezcla sobre el café en ya molido que está en el colador, el resultado final será un exquisito café.
Por otra parte, preparar café cubano en cafetera es la forma más sencilla, solo consiste en llenar la cafetera con el agua y el café en los compartimentos correspondientes y dejar colar, algunos añaden el azúcar junto al agua, otros lo agregan a la hora de servir.
La cafetera tradicionalmente usada para hacer café cubano es la italiana, pero hoy en día existen muchos modelos modernos que también son altamente utilizados dentro y fuera de la isla.
Ahora bien, si te digo que la tercera forma de preparar café cubano es con espuma quizás no lo entiendas al principio, pero estoy segura que eso cambiará en cuanto te diga cómo se hace.
En realidad, esta forma es solo un extra a la que hacemos con la cafetera italiana, es tan simple como añadir el azúcar (moreno de preferencia) a una taza pequeña y removerla constantemente con 2 cucharaditas de la primera colada hasta formar una crema muy espumosa.
Al final le añadimos el resto del café colado a la taza y degustamos. Hay quienes solo preparan una taza con espuma y luego la reparten por el resto de las tazas servidas de modo que la espuma quede en la superficie.
Particularmente me gusta más así porque además de no concertarse tanta azúcar queda muy similar al expreso recién colado en cafeteras modernas, con mucha espuma.
Otras maneras de consumo de café cubano son:
Café con leche: al pedir un café con leche, el resultado es la mitad de una taza de café fuerte y leche caliente, al mezclarlo obtenemos el café con leche. Es una bebida muy importante en las mañanas para el desayuno de niños y adultos.
Cortadito: Es el café cubano fuerte mezclado con una pequeña cantidad de leche muy caliente.
Datos curiosos sobre el café cubano
Fue en el siglo XVIII, su entrada al país y no fue hasta después de 40 años que cogiera fuerza económica y gran importancia para los pobladores.
Hubo un momento en que la exportación del café era más importante que la del azúcar; ¿se imaginan?
Para algunos países el café cubano es muy apreciado y cotizado y esto se debe a las condiciones geográficas y climáticas en que se cultiva, a los suelos, al tueste oscuro y al exquisito sabor que tiene comparados con otros cafés del mundo.
Es una bebida de suma importancia, sobre todo en las mañanas para el desayuno, así como para brindar con amigos y familiares, para reuniones o eventos.
Aunque su origen aún no se descifra con exactitud, fueron los franceses los primeros en introducir el café en el país caribeño, esto fue acto seguido a la llegada de los franceses a la zona oriental después de la revolución antiesclavista surgida en Haití.
A parte de su sabor dulce, una característica de expreso cubano es la calidad, posicionándose en la tabla de posiciones como uno de los más gustados y vendidos.
El principal comprador es Japón, que suelen ser un mercado muy exigente, pero sigue en sus preferencias el café cubano.
En nuestro país se conserva la mayor cantidad de ruinas de haciendas cafetaleras, algunas aun bien conservadas y denominadas por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad. Las más representativas son: Buena Vista y La Unión en las terrazas, La Isabelica, en la Sierra Maestra y la hacienda de Don José Gelebert, en el Wajay, también son considerados como importantes atractivos turísticos, donde reciben visitantes de todas partes del mundo.
Es la regla de oro de la cortesía cubana, con tan solo una frase: ¨vamos hacer un café ¨ ya se intuye que estamos recibiendo a alguien en nuestros hogares.
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