Helado de Plátano y Mantequilla de Maní

Si eres de los que prefiere explorar nuevos sabores, no te puedes perder este helado de plátano y mantequilla de maní.

Es sumamente sencillo de preparar, pero además, el resultado es un helado de sabor delicioso, diferente, con abundantes aportes nutricionales y que se puede convertir en la mejor fuente de energía para tu organismo.

En este sentido debes conocer que la mantequilla de maní aporta nutrientes esenciales para mantener el mantenimiento de la salud, y el plátano, también se describe como un alimento con importantes beneficios para nuestro cuerpo.

Por todo esto y otras muchas bondades que tiene esta receta para ofrecer, no te la puedes perder.

Prepara tu delicioso helado casero de plátano y mantequilla de maní, y veras que el resultado se convertirá en una elaboración habitual de tu recetario de cocina.

¿Cómo hacer helado de plátano y mantequilla de maní?

Preparar este halado de plátano y mantequilla de maní carece completamente de complicaciones.

No obstante, si te interesa conocer algunos tips para que la receta sea aún más sencilla y el resultado quede perfecto, los compartimos a continuación:

En primer lugar, asegúrate de llevar a cabo de forma correcta la selección de los plátanos. En este sentido debes seleccionar los que estén frescos y sobre todo bien maduros.

Ten cuidado con el tiempo de batido, pues como hemos comentado en ocasiones anteriores, el calor que desprenden las cuchillas puede derretir demasiado la mezcla.

En esta receta, por ejemplo, que debes licuar por separado primero el plátano y luego la mantequilla de maní, tienes la opción de agregar juntos ambos ingredientes para disminuir el tiempo de la licuadora y así garantizar la textura cremosa y firme del helado.

Si notas que se dificulta mucho batir, puedes agregar una o dos cucharadas de leche entera y veras que se hace más fácil el licuado.

Una vez listo el helado, puedes adicionarle maní tostado troceado al gusto para darle un acabado crujiente.

También puedes usar otros frutos secos, o simplemente decorar con miel, siropes, mermeladas de frutas o lo que más te guste.

Una opción que algunos emplean y obtienen un helado mucho más dulce, consiste en darle a los plátanos un hervor antes de congelarlos, el resultado es sorprendente.